Marcos Hernández Martínez. Cumpleaños 12 de marzo.

 

Mi nombre es Marcos Hernández Martínez, nací en la Ciudad de México el 12 de Marzo de 1965, ciudad en la cual viví los primeros 40 años de mi vida, estudie Ingeniería Civil en la Facultad de Ingeniería de la UNAM, la cual fue, es y será siempre mi querida “Alma Mater”.

Cuando era niño, siempre me considere introvertido, situación que cambio a partir de mi paso por la facultad, durante mi juventud se amalgamaron en mi 2 grandes pasiones, la música y el cine, de las cuales nunca dejo de aprender, en la música, por ejemplo, nunca he considerado que existan géneros musicales buenos o malos, sino más bien, existen grandes y mediocres interpretes; en cuanto al cine, siempre considero un espacio de tiempo para ir a las salas por lo menos 1 vez al mes, obvio antes de la pandemia, creo que es una de las cosas que más extraño, asistir al cine.

Algunos de mis otros pasatiempos favoritos son armar rompecabezas (mi record es uno de 5000 piezas) y coleccionar monedas, he reunido, a través del tiempo, una colección de aproximadamente 800 piezas de todo el mundo, pero principalmente de mi querido México. 

 Me gustan mucho los deportes, particularmente el futbol el cual he practicado desde siempre (soy muy aficionado de Pumas de la UNAM) y el futbol americano, el cual practique durante 4 años.

 Estoy casado desde hace 25 años, he formado una familia maravillosa con mi esposa Martha y mis 2 hijos, Cesar Nacxit y Eloísa Atzin, los cuales son mi orgullo y las personas más importantes y amadas en mi vida, actualmente están estudiando los 2 ingeniería (industrial y biotecnología respectivamente).

 Desde que egrese de la facultad, nunca he dejado de hacer ingeniería en mi vida, sin embargo, siempre lo he combinado con la docencia, tengo prácticamente 30 años dedicados a la docencia en menor o mayor medida, he dado clase desde el nivel secundaria hasta nivel universitario, desde materias básicas de matemáticas hasta muy especializadas, siempre con la pasión de enseñar y trasmitir no solo conocimientos, sino valores, los cuales recibí en gran medida desde el bachillerato por mi querida Universidad.

 Actualmente me considero una persona pragmática, trato siempre de encontrar un lado útil a las cosas, confieso que el orden no es uno de mis mayores talentos, sin embargo, trato siempre de organizarme en la medida de lo posible para continuar con mi crecimiento en todo sentido, mi meta, nunca dejar de aprender.